Delegación del Gobierno

La plataforma Civitas Mérida quiere denunciar y hacer ver los más de 30 años que lleva la Delegación del Gobierno en Extremadura sin estar donde le corresponde, que no es otro lugar que la sede donde radica el  Gobierno de la Comunidad Autónoma, es decir, Mérida.

Como recogen la Ley 17/83 de 16 de noviembre, en sus artículos 2 y 4, y la Ley 6/97 del 14 de abril, en su artículo 22.3. la Delegación del Gobierno debe estar localizada donde radique el Consejo de Gobierno de la Comunidad Autónoma, salvo que el Consejo de Ministros determine otro lugar, y en Extremadura no se han dado esas condiciones. A pesar de la existencia de leyes y normas, los sucesivos Gobiernos autonómicos con independencia de su signo han permitido que Extremadura sea el único lugar de España donde ocurre algo semejante.

Como decimos, por ley la propia Delegación debe estar en la capital autonómica, correspondiendo una subdelegacion en cada capital provincial que no sea a su vez capital autonómica, pero en Extremadura se da la vergonzosa circunstancia de que la Delegación se encuentra en el mismo lugar que la Subdelegación del gobierno en Badajoz cuando a esta ciudad solo le corresponde una Subdelegación (como ocurre con la Cáceres y en el resto del país).

Esta actitud por parte del Gobierno regional nos parece lamentable, ruin y todo lo que se pueda decir de aquellos que nos han gobernado y nos gobiernan que hayan despreciado a nuestra ciudad

No siendo suficiente con todo esto, el Delegado del Gobierno en Extremadura se presenta en Mérida para decirnos en presencia de diversos políticos locales que nuestra ciudad cuenta con dos policías nacionales más que cuando residía en la ciudad el presidente autonómico, jactándose de ello aún sabiendo que es informacion falsa, ya que entonces había diez policías nacionales más en la ciudad.

Por esta razón la Plataforma Civitas Mérida denuncia los más de 30 años de desamparo del Gobierno regional en este aspecto además de otros muchos, mostrando una actitud impropia y desconocida en cualquier otra región de España para con la capital autonómica. Además, nos preguntamos si nuestro Ayuntamiento alguna vez será capaz de velar por los intereses de la ciudad para que hechos semejantes no se repitan más y se acabe de una vez con una situación que dice muy poco de que quienes nos gobiernan.